miércoles, 10 de marzo de 2010

929

Un mes.
Me sigue pareciendo que fué ayer;
todos los días,

es pensar que fué ayer.
El tiempo no pasa nunca, se detuvo en ese momento.
es esperar todos los dias

que vengas.
que me abraces.

que me hables.
y escucharte entredormida

y despertarme por sentirte
y soñarte en la habitación
cuando se que ya no existe.

caminar con una cierta angustia
cargar con un nudo en el alma
y sentir la tristeza hasta en el aire

y la ausencia en el comedor
en el sillon
cuando llega la tarde,
y la puerta se abría;
y en cada uno de nosotros

ese dolor.
ya no valen los arrepentimientos

y las promesas que no se pudieron cumplir
y las palabras que no dijimos,
ya está.

No podía amarte más,
pero jamás pude darlo
como yo quería.
Porque no estaba, porque no te tenía
porque vos estabas allá,
y yo acá.
sé que sufriste tanto el tiempo que viviste
y que sin embargo sabias reir

y amar
y preocuparte por todos

para que estuvieran bien.
y apreciar hasta lo más mínimo
cuando ya no te quedaba nada
para ser felíz.

Subir esa escalera
ver tu nombre en la pared
"Helguero Franco"

y tratar de convencerme
de que lo que queda está ahí,
en un cajon.

Que jamas te voy a tener de nuevo
que las cosas que soñamos hacer juntos

cuando crecieramos
cuando pudiera irme de acá
y estar con vos

cuando pudieras ser mayor para comprarte un pasaje
y venir a verme
y ayudarnos a estudiar
y visitar a los abuelos juntos;
no existe más.
Quebrarme por completo
y llorarte, es lo único que puedo hacer.
A veces me es más fácil creer
que te fuiste de viaje,
Y que ya estás por volver.
y que ya estás por volver.

No hay comentarios:

Publicar un comentario